miércoles, 26 de noviembre de 2008

Por algún motivo que desconozco,
quizá que la noche es especialmente fría
y me he acordado de nuestra ropa de camilla (la de leopardo rojo),
he recordado que al independizarte
no me pediste que me fuera a vivir contigo,
ni siquiera me lo preguntaste...
Lo dí por hecho...
Quizá ahí está la clave...
A lo mejor no estabas seguro...
Y me siento ridícula...

domingo, 23 de noviembre de 2008

BICYCLE

- Shsh, shsh!. (Joder, ¿también aquí me van a reñir?)
¿Cuánto te costó la bici? (Cara de sorpresa)
- No lo sé, fue un regalo
- ¿Ves?, si te hubiese costado 500€... es un regalo... No la aprecias. (Cara de desconcertada. ¿Cómo la estaré amarrando?)
- Si ahora viene un tío alto y fuerte como yo, mira... (la alza deslizándola sobre el mástil sujeta-árbol y casi la saca). ¡Se la lleva!
- Jaja! (Con cara de desconcertada). La altura de mis ojos llega hasta aquí... No he levantado la cabeza.
- Hay mucha gente como tú... Y cuando cierro el bar a las tres les dejo una nota (con gesto de que se las lleva): “pregunta por Ángel del Central”. Tienes que cuidarla más.
- Si tu supieras lo que yo aprecio mi bici...¡Pues cuídala! (la desato y me la llevo a otro lugar, esta vez al árbol, no al mástil).