miércoles, 26 de noviembre de 2008

Por algún motivo que desconozco,
quizá que la noche es especialmente fría
y me he acordado de nuestra ropa de camilla (la de leopardo rojo),
he recordado que al independizarte
no me pediste que me fuera a vivir contigo,
ni siquiera me lo preguntaste...
Lo dí por hecho...
Quizá ahí está la clave...
A lo mejor no estabas seguro...
Y me siento ridícula...

5 comentarios:

Wakkon Fri dijo...

No sé porque extraño y casual motivo he descubierto que tienes blog...he leído el primer poema que aparece a la vista...y es sencillo, bonito y doloroso...un dolor que salpica en todas direcciones... porque considero que debe ser algo especial el hecho de que alguien sea capaz de introducirte en un poema, aunque gotee dolor.

la chica de las biscotelas dijo...

Bueno... es una forma de aparentar que hablo con otro interlocutor que no soy yo. Para no tener la sensación de que me estoy volviendo loca. Y por que hay recuerdos íntimos, que se comparten dos a dos que caeran en el olvido si no es así... De lo que no se habla no existe

la chica de las biscotelas dijo...

Pero resulta que ahora si que tenía que dar por hecho que querías formar una familia CONMIGO...
Paradojas de la vida

Wakkon Fri dijo...

¿A quien contestas lo de la familia bajita?...

la chica de las biscotelas dijo...

no querrás saberlo